Campana de Largada - Turf Argentino

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A la vera del camino

ROMPIMOS NOTAS, ESTA VEZ LE TOCÓ AL REPORTAJE A KICILLOF Y LO DE LA ANOTACIÓN PARA EL 25. NO SE ENTIENDE, A QUÉ SE DEBE, QUE NO HAYA CARRERAS

Cuando se suspendió la reunión del viernes y se pasó al jueves nos pusimos contentos, pero cuando se anuló la del jueves, ya nos permitimos pensar mal. Y lamentablemente, se dice “lo que tengas en tu mente va a suceder”, sucedió. Sabemos, no somos necios que se está dentro de un problema importante, de más contagios, especialmente o únicamente en las villas, como se aguardaba desde el mismo día que nos enteramos que había llegado el virus a nuestro país. Qué se podía esperar de barrios cerrados, sin agua, sin cloacas y gente de a seis viviendo, si se puede decir viviendo, en una pieza de dos por tres. Pero lo que no se puede entender es que así como el Sr. Presidente de la Nación abrió la fábrica de autos, Volkswagen, nunca en la historia de Argentina se tuvo tantos autos aguardando que alguien los compre, venía del otro período presidencial sin hacer política, con 1500 empleados en planta trabajando seis horas por día desde el lunes al viernes de cada semana. Mientras nosotros pedimos la apertura, con dos personas a dos metros, con barbijos, que luego uno de ellos se junta con otros a distancia en plena carrera y luego no hay contactos con terceros. Una vez por semana para comenzar. Miles y miles de hombres y mujeres que viven de las carreras de caballos, del Turf, están hace dos meses mirando el techo y encima el 25 en lugar de anotar sus caballos para correr van a escuchar otra vez “se quedan en casa dos semanas más”. Es demasiado, es mucho, ya casi incontrolable para las familias. Merecemos mayor atención, aunque más no sea parecida a los vecinos de Uruguay, de Chile y de otras partes. No hay contactos, por ende no hay contagio.

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por Osvaldo Martinez