Campana de Largada - Turf Argentino

COMO EL MARTES PASADO ESTUVIMOS EN EL ESCENARIO NORTEÑO CON EL MOISES, EN EL MISMO LUGAR QUE DENTRO DE POCOS DIAS CONCURRIRAN 80.000 PERSONAS

A las 10.25, exactamente, pasé al lado del transporte que llevaba otra vez a El Moisés hacia la cancha principal del Hipódromo de San Isidro. Tras llegar al estacionamiento de los empleados, me apresuré para esperarlo en el lugar de siempre, en el embarcadero, cerca de la veterinaria, de las duchas y de donde el sábado 13, bajará para participar en el máximo evento de nuestra hípica. En primer lugar llegó el camión que traía a Tabué, pupilo de Raúl Tavella, que ya estaba desde temprano en las instalaciones. Qué cosa, no, hay una cantidad impresionante de caballos que no conocen el pasto y ni aparecieron, ante la oportunidad que les brinda el Hipódromo de San Isidro. Estoy seguro que si no lo hubiesen permitido, les caerían con todo el rigor de sus protestas. Sólo dos, El Moisés y Tabué, en la mañana del martes. Los aguardábamos Nicolás Alcalde y Diego Trubba del portal Pura Hípica y quien escribe esta nota.

Llegó el entrenador Gregorio Vivas con el equipo y enseguida apareció el camión de Montenegro con la preciada joya. Le abrieron las puertas y el musculoso hijo de Manipulator, bajó como si fuese un gato del sillón de una casa, sin inquietarse, había salido a dar una vuelta y estaba todo bien. El mismo trabajo de cambios de vendas, por los fieltros apretados, y el camino que hará dentro de pocos días, esta vez en soledad. Lo aguardaba Edwin Talaverano, con las antiparras especiales con la cámara a bordo (foto), se colocó los guantes y saltó a la cancha, tras hacer una prueba de filmación, levantando el pulgar de su mano derecha.

Ya en la pista, fue hacia la Popular, dio la vuelta y comenzó su trabajo, el que figura en la nota de arriba de nuestra página. Cuando pasó al lado nuestro Hugo Miguel Pérez, otro profesional que siempre está a la mano, para lo que se necesita, nos saludó desde lo más alto de la tribuna oficial. Esperamos todo el recorrido y cuando pisó los 200 finales comenzó a trabajar nuestra máquina de fotos, las que compartimos con todos nuestros lectores, y mientras lo seguíamos después del disco, Hugo nos gritó: 2´8” clavados.

En el regreso, Edwin Talaverano al pasar a mi lado, tuvo la gentileza, de nombrarme, en una muestra más de su colaboración hacia mi persona, y por ende, como lo hice toda la vida, hacia el turf todo, porque la filmación quedó en el Hipódromo de San Isidro, en las expertas manos de la gente de televisión, para que lo muestre durante la jornada de este miércoles, y por supuesto para que se lo entregue al medio periodístico que lo solicite.

Después pasó Tabué, haciendo el reconocimiento de la pista.

Entramos en los metros finales de la gran carrera de diciembre y Ud. lo va a vivir por www.campanadelargada.com como lo venimos haciendo desde hace 25 años, gran parte en el programa televisivo y ahora en “La Página”. Por supuesto sin olvidar a la Revista Palermo, donde entré a sus filas un 1 de noviembre de 1974.

¡Aquí estamos!