Campana de Largada - Turf Argentino

LOS CAMOGLI FESTEJARON UN NUEVO TRIUNFO DE LA INVICTA QUE AL PARECER TIENE CUERDA PARA RATO. ¡TRES DE TRES!

Explicamos perfectamente lo que iba a suceder en el cotejo jerárquico. En relación que, a la potranca del stud haras El Alfalfar, no le hacia falta salir con grandes ejercicios, ni partidas voladoras. Lo que nunca se nos cruzó por la mente que la Easing Along asumiera el comando no bien habían recorrido unos metros y se los traiga de una oreja al disco revoleándoles la cartera por la cabeza.

Pero como dijimos en una oportunidad los caballos de los Camogli no sirven para “venir espiando la carrera”. Ni tampoco “esperando a ver que pasa”. Para comenzar los caballos son guerreros y si están listos deben salir a la cancha. Corren, sin dar ni pedir cuartel, a todo o nada. Jamás lo escuché a Alfredo I mandar a sus jinetes al famoso “ponelo quinto y capaz que arriba…”. No así no. Con el cuchillo entre los dientes. Soplándoles la nuca o rompiendo el viento. Cara o ceca. Los triunfos de esa forma tienen otro color, otro aroma, otro gusto.

Y Weeping Cat que salió bien pisada se puso segunda de King Of Dance, que se mandó a la punta, tras sacarse de encima en el salto a Pure Dashing. Cerca de ellos viajaban Sandakan, Lake Driver y Don Hot. Recorridos los primeros metros de cabeza torcida Weeping Cat asumió la vanguardia. King Of Dance quedó tercero, cerca Titio, el tordillo Lake Driver, junto con Pure Dashing, abierto Don Hot y más abierta ganaba terreno Miss Enjoy, mientras que en el último lugar se desempeñaba Por Amistad.

Cuando pisaron tierra derecha Eduardo Ortega Pavón la enfiló junto a las tablas. Y arrancaron casi todos. King Of Dance tratando de atrapar a la líder, infructuosamente, amagaba Lake Driver, lo propio hacia abierto Don Hot, junto con Miss Enjoy y atacaba bien abierto un tal El Chabacan.

En los 250 con su jinete castigando siempre de zurda Weeping Cat ya era inalcanzable. Atrás bajaban todas las fustas y las manos de los ejemplares se estiraban en busca de la puntera que sudada (un amigo me decía y cómo no van a sudar, con el calor que hace, corriendo a 64 kilómetros por hora y con un tipo encima y la verdad tenia razón) mantenía la ventaja. Seguía porfiando El Chabacán, guapeaba Titio, uno de los más lindos de la prueba camino a los partidores y desde el fondo, descontando como si su jinete viniese arriba de una moto (de una Gilera) Por Amistad quería hacer el uno-dos de Roberto Andrés Pellegatta. En los 50 Orteguita se puso para la foto, El Chabacan en gran carrera cruzaba a tres cuerpos en el segundo lugar, manteniendo a raya a Titio, por ½ cabeza. A largo y medio en el cuarto Por Amistad, que cuando se estiren los metros, dará batalla y a la ventaja mínima King Of Dance.

El ganador pasó las doce cuadras en 1´10”74, con los siguientes parciales: 21”64 los primeros 400 metros y 45”09 para los 800 metros .

Cuando estaba por entrar al recinto de los vencedores, hay una foto de los muchachos mirando como preocupados por la tremenda sudada de la alazana. Estaban Alfredo Camogli, su hijo Alejandro, amigos íntimos como Matías Lamas con su hijita Paloma y su hermana recién llegada de España, la bonita Fabiana. Alfredo II con su señora esposa Carolina y el hermoso bebé, Alfredo IV. Y también estaban, como Campana, siempre están, los amigos entrañables Ato Gonzalez Alzaga y Conrado Garzoli.

Dejé para el final a la querida y estimada Amalia. Feliz, vivía un momento extraordinario y claro que en muchas oportunidades trae buenas ondas y algo de suerte, siempre necesaria cuando por el caso de Weeping Cat tenía que seguir invicta. Estuvieron ausentes Jacinto y Esmeralda, pero Amalia prometió llevarlos en la próxima presentación de la chaqueta ganadora. Los esperamos…

Weeping Cat ha salido tres veces a la cancha de césped y las ganó todas.

Ya saben que tengo listo a Juan Vázquez para ir al haras en pos de la madre de los grandes caballos que salieron del Haras El Afalfar. Lágrimas de Oro alguna vez va a recibir un premio en los Pellegrinis. Y seguro que estará “Batman” Vazquez para recibir junto a los Camogli el tan preciado trofeo.

En cuanto al nombre de la invicta uno le pone “Gata Llorona” en inglés y listo. Pero mirándola ir para adelante en la largada, cruzar la raya de cabeza alta y volver sacando pecho la hubiesen pegado con un modesto Weeping Minga.

Salud campeona.

Se recaudaron en San Isidro con 16 competencias $ 2.177.838.-
  

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