Campana de Largada - Turf Argentino

THUNDELARRA Y STAR RUNNER VAN DE LA MANO, PERO LA INVICTA PERDIÓ ESA CONDICIÓN UNICAMENTE EN EL COMISARIATO

Nunca les conté algo de mi vida privada. Bueno, algunas veces, pequeños comentarios, más para embromar que en serio. Hoy quiero decirles que me fui temprano a La Reja, donde se reunía la familia, y si bien faltaban, con aviso, mi hijo mayor y las dos nietas más grandes, que son un amor, iban a estar las más chiquitas. Con uno de mis hijos, ya había prendido el fuego, preparamos una picada chica, y arranqué con los chorizos y el pechito de cerdo. Comimos, jugamos con los niños, tomé fotos y en el mejor momento les dije, tengo que ir a Palermo. El trabajo me llama, tengo que cubrir con la cámara el clásico de hoy y porque tengo que fotografiarlos a mis amigos del Don Florentino.

Por supuesto que nadie hubiese entendido nada si me ponía a explicarles que la yegua importada que este sábado defendía los colores del “Gringo” Grimaldi, no podía perder. Casi en un acto de locura, según algunos amigos que son muy estudiosos de las carreras, la había dado de candidata en nuestra página. Y tras una hora y media de estar en el medio de gente que va y viene todo el domingo de un lado para otro, gastando nafta, llegué a la “alfombra dorada”. Y pasó lo que pasó…

Y encima, apenas bajaron la chapa de Thundelarra, entró corriendo un señor de gorrita negra gritando supuestamente a su caballo para sacarse la foto. Y encima con los Grimaldi al lado, atónitos, como sin saber lo que pasó, pero sabiéndolo. Parece que el señor no entiende nada de códigos y que cuando se gana una carrera, porque otro le reclamó al que ganó hay que ir en silencio y tras el gran momento de sacarse una foto cuando perdiste, retirarse sin decir una palabra. Eso es ser un señor, gorrita.

En la redonda de exhibición ambos ejemplares estaban preparados al detalle. Y por supuesto nadie podía pensar lo que iba a suceder en la recta de Palermo con cuatro, con tan solo cuatro ejemplares corriendo.

Ya en el salto, no bien se abrieron las puertas, se notó que la importada levantó las manos como para pararse, y no para arrancar a 65 kilómetros por hora. Luego viajó siempre abrigada a los palos, mientras Noriega, con Mina Pirquitas, corría adelante con parciales picantes de 22”41 para los primeros 400 metros, lo seguía Watch Her con Anselmo Zacarías y Unitas, con Altair Domingos. Volcaron el codo y dando toda la vuelta el panorama siempre era el mismo, el trencito de tres y nuestra candidata exclusiva junto a los palos, con Rodrigo Blanco muy parado en los estribos, demasiado para mi gusto, pero denotaba que la máquina de abajo venía entera. Y en 45”48 los 800 fueron a pisar tierra derecha. Y comenzó el drama.

Junto a los palos Noriega, a su costado con un leve espacio, pero no para que pase un camión como la pupila de Hugo Sanagua, afuera Unitas y a los palos sacando hacia fuera como diciendo “aquí vengo yo” se mandó Blanco con Thundelarra. Lógico, ni Zacarías cooperó, todo lo contrario, sino que además, Domingos acompañaba en el “no la dejes pasar”. Y Blanco se comió el cajón corriendo cuatro caballos. Siguieron un buen trecho como lo venían haciendo en el opuesto, pero faltaba lo que faltaba.

Se escaparon Mina Pirquitas y Unitas, abierta Watch Her con la lengua afuera, ya le había dado su merecido a uno que con el auto trató de meterse en un lugar indebido y se encaminaba a un cuarto puesto entre cuatro. Pero Rodrigo Blanco sacó en un mosaico a su conducida hacia fuera y la verdad yo desde un escritorio no puedo decir que lo fue a buscar con premeditación y alevosía, pero que le pegó le pegó. Lo que sí creo, es que si lo toma más por la mitad lo parte al medio. Y lo que sí puedo decir, también, es que Camoranesi, o que se yo cómo se llama el jugador de futbol, ante la patraña del jugador rival, que según dicen hizo teatro, con toda la onda del mundo le pateó la cabeza. Eso sí se vio clarito…

La gran yegua que mantenía un record de cuatro corridas, cuatro ganadas, ante el estímulo de Rodrigo Blanco, volvió sobre las posiciones de las punteras y las alcanzó en el disco, sacándoles pescuezo y ¾ de cuerpos, respectivamente, marcando 1´22”82 para los 1400 metros, con un tercer parcial de 1´9”26 para las doce cuadras.

Antes de que volvieran los jinetes, la chapa de la invicta estaba en el medio del lago.

Un día que se presentaba de felicidad absoluta para ellos, para los Grimaldi, para los profesionales y para todos los que los queremos, terminó patas para arriba.

Y encima entró el de gorrita gritando para sacarse una foto.

Ganó Mina Pirquitas por distanciamiento de Thundelarra, eso figurará en el resultado, pero permítanme decirles que Thundelarra, a la fecha, corrió cinco carreras en nuestro país y las ganó todas. Y marcha invicta…

Se recaudaron en Palermo con 14 competencias: $ 3.482.571.-

Premios: 55000.00 al 1º, 13750.00 al 2º, 8250.00 al 3º, 5500.00 al 4º, 2750.00 al 5º
Dividendos: (2) MINA PIRQUITAS $ 1,85. Apuesta Exacta (2-5) $ 25,70. Apuesta Imperfecta (2-5) ó (5-2) $ 17,90. Apuesta Trifecta (2-5-3) $ 59,20. APUESTA DOBLE: a ganador $ 8,10, a placé $ 12,30. APUESTA TRIPLO $ 67,50 (531 apuestas). APUESTA PICK 4 $ 120,30 (968 apuestas).

Descargar documento relacionado: RATIFICADOS - Domingo 30-10-2011.pdf