Campana de Largada - Turf Argentino

CASI HAY UNA TRAGEDIA EN EL CODO, PERO LA JOCKEY ANDREA MARINHAS SE PUSO SERIA Y FUE GRAN HAZAÑA

Antes que nada quiero poner las cosas en su verdadero lugar. Un día defendí a Mario Leyes porque no me entra en la cabeza que un jinete quiera hacer rodar a un colega o piense por un instante “ahora lo cierro y si se cae se cae”. Cualquier profesional que pueda hacer o pensar una cosa así no debería correr más, nunca más.

El caso de este domingo en el primer codo, cuando salieron firmes a la punta Cafrune con la monta de Andrea Marinhas, José Ricardo Méndez faltó con aviso y Alghero con Horacio Karamanos deja mil preguntas en el aire. Y reitero lo de “no me quiero lavar las manos”. Máxime cuando puedo opinar seriamente y cuando estoy seguro de lo que digo. Entonces me tiro de cabeza y digo, escribo, lo que pienso. Tampoco le quiero tirar el fardo a la Comisión de Carreras, pero la filmación dirá casi con seguridad qué es lo que sucedió en ese preciso instante, cuando Marinhas tuvo que hacer equilibrio cuando su caballo golpeó y no literalmente contra los palos.

Pudo suceder lo peor. Nos imaginamos el susto primero y el enfado y la bronca después, tras correr desestribada, quedar lejos en el pelotón por los 600 y  llevado con la mano de seda de la jockey, ganar terreno abierto y de pronto pelear mano a mano en la recta con Cristian Menéndez que conducía a Seminú. Hasta nos pareció en la repetición, que Marinhas cuando pasó al lado del líder Alghero, con Horacio Karamanos tuvo tiempo de mirar para adentro. Parecía vencida, pero ella se dijo, tengo que ganar esta carrera. Y pegando como nunca la vimos pegar, retomó el comando y metro a metro se fue acercando al disco triunfal con 1 ½ cuerpo de ventaja sobre Seminú de gran carrera. A tres largos en el tercero pasó Batt Finder que no se entregó nunca, cuarto Banganyko, que vino lejos todo el trayecto, seguido por Lost Halo, City Thunder y Alghero, al que le duró la cuerda en la punta hasta la mitad de la recta y después lo pasaron como a un poste.

Es la primera vez que veo aplaudir en una agencia de apuestas cuando la “nena” volvía al recinto de los vencedores. Incluso no me tocó, que uno que siempre habla por atrás y bajito, dijo: “si esto lo hace Falero o Ricardo hablan un mes seguido”. Digo que ni me tocó porque de Andrea Marinhas vengo hablando a favor hace mucho tiempo. Incluso, ella en persona me ha solicitado, y por supuesto le dije que sí, para mi es un honor, levantar las notas que salen en www.campanadelargada.com y presentarlas en su página web: www.andreamarinhas.com.ar

Y en todos mis comentarios dije lo que tenía que decir de Andrea Marinhas. Posiblemente en veinte a favor y en una en contra. Y no precisamente por ese malabarismo cuando volvió a la silla de Cafrune, cuando le movieron el piso, sino por su manera de correr, su profesionalismo y su respeto a sus colegas y el cariño que tiene por la actividad toda. Es gente de turf.

Digo más, es la primera vez que la veo “grande”. No estaba al lado de ella para consultarla sobre lo sucedido. Eso sí, seria, aparentemente sin decir una sola palabra, cuando se bajó del pensionista del stud S. de B. Sólo recibió un beso de Campito, el compañero-hermano de José Mastellone, de vacaciones por unos días más. Volvió serena tras dar el peso, casi con una sonrisa a flor de labios. Caminando como por una pasarela, tal cual modelo. Mitad buena como ninguna, como siempre en sus actos de vida y la otra mitad con cara de mala, pero no, estaba indignada. Preocupada porque pudo haber pasado lo peor. Los palos, el mismo caballo, todos encima, menos uno, que venían atrás, recién lanzados a la velocidad máxima. Imposible de sortear o detenerlos .

Sólo atinó en la foto final a levantar los dos brazos a la vez en varias oportunidades. Ella estaba de espaldas a la cámara, pero seguramente le contaba a los que posaban en el podio el momento difícil que pasó.

Habrá que aguardar la resolución de la Comisión de Carreras. Eso sí, debo decir que en este caso puntual no hay medias tintas. No quiero escuchar la próxima semana que a Karamanos le dieron cinco fechas, diez o lo que sea. Molestó o no molestó. Fue temerario su proceder si o no. Si no fue adrede nos imaginamos que Marinhas habrá recibido las disculpas sentidas de Karamanos. Si se ve otra cosa la pena tiene que ser ejemplificadora.

El vencedor (465 FF AA) ha salido a las pistas en quince oportunidades, logrando cinco victorias, todas en el Bosque, este Clásico, un Especial, un Grado3 y un Grado1. Marcó para los 2000 metros 2´6”04, con los siguientes parciales: 25”84 los 400; 50”40 los 800; las doce cuadras en 1´14”57 y la milla en 1´39”70.

Como anticipamos las fuerzas vivas respondieron al llamado de los $ 140. 000.- y depositaron en ventana, en efectivo $ 330.000.- Con los descuentos de ley quedaron limpios $ 231.000.- El 80% fue de $ 185.000.- más los $ 140.000.- de incremento, hicieron un total de $ 325.704.- para los 5 aciertos. ¡Extraordinario!

Cafrune pertenece al stud S. de B., nació y fue criado en el Haras El Paraíso, lo entrena Néstor Yalet, lo presentó Domingo Torrilla y lo corrió Andrea Marinhas. Nos falta el nombre del “Angel de la Guarda”. No para conocerlo, sólo para darle las gracias.

Se recaudaron en La Plata con 15 competencias: $ 1.970.873.-

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