Campana de Largada - Turf Argentino

SE COMENTA QUE NO FALTA MUCHO PARA QUE EL HIPÓDROMO DE PALERMO SE PONGA SERIO, COMO ANTES DEL VIRUS, Y AUNQUE LO SEGUIMOS TENIENDO A NUESTRAS ESPALDAS, PERMITIRÁ LA ENTRADA A LA OFICIAL DE ELEGANTE SPORT. NO A LAS ZAPATILLAS, ERA HORA.

Por momentos estamos contentos que en Palermo puedan entrar una cantidad de aficionados, aunque habría que tomar medidas duras con respecto a los imbéciles que siguen sin usar el barbijo, o lo tienen en la garganta, como si fuese una avivada, una piolada, diciendo como se ve a cada rato en las calles, “yo hago lo que quiero”. No digo como ese policía a la salida del subte, no me fijé en qué lugar del mundo fue, pero estuvo bueno, porque al que salía sin barbijo, se lo hacía poner a los palazos. Los tarados asustados, enseguida se lo colocaban, algunos, incluso, sacándolos de los bolsillos. Espero se cumpla con el protocolo, antes que no pueda entrar nadie. Tras esa gran medida de abrir el Restaurante de la Tribuna Oficial, ahora, dicen, se podrá ingresar, pero de elegante sport, zapatillas afuera, y con la adquisición de un vale de 100 pesos para jugar. Faltaría abrir la Confitería del Paddock, tan necesaria en tanto y en cuanto que habrá mucha más gente en ese sector y por lógica se tendrá que poner más ventanas de venta de boletos en ese lugar. En síntesis, Palermo va mejorando las comodidades para la gente que visita el predio. Poco a poco, paso a paso. Y está muy bien.

En San Isidro el protocolo está cuidado al máximo y están abiertos dos lugares para tomar y comer algo, con una entrada de aficionados ínfima, incluyendo los peones que ven la carrera desde la tribuna, o en la pantalla que está instalada, como en la Oficial, donde no hay nadie, y solamente la transitan los periodistas y fotógrafos. Parecería que esto va a seguir así, pero se viene el frío, y la gente no puede quedar afuera, a la intemperie. Es necesario, ya que en todo San Isidro están abiertos todos los restaurantes y todas las confiterías, que se le permita el escenario hípico, mayor de la Provincia de Buenos Aires, el Hipódromo de San Isidro, del Jockey Club Argentino, abrir sus dos restaurantes, además de los que ya están, con mesas separadas, como corresponde y como se nota en la foto de tapa que tomamos en Palermo.

Claro que hoy por hoy, la cosa marcha bastante bien como están las cosas. No tenemos infectados, nada que ver con el futbol, por ejemplo, que a cada rato hay un plantel entero con el virus encima. Por supuesto que más gente implica tener más cuidados, pero ya demostramos, salvando algunos irresponsables, que nos sabemos cuidar bien, muy bien. Y las recaudaciones pisan con holgura los más de 30 millones de pesos por jornada.

Eso sí, los aficionados merecen los cuiden y los atiendan. A eso deben apuntar los escenarios…