Campana de Largada - Turf Argentino

Faltaba bastante para que se corriese la primera carrera del viernes pasado, afuera lluvia y viento helado y apenas ingresé al lugar donde hay aroma a turf a cada momento, me refiero al cuarto de jinetes y de las jockeys, al de los montureros, el pesaje previo y al de las chaquetillas, ya estaban todos en sus puestos. Ellos vienen temprano y se van tarde, especialmente los muchachos de las monturas, que comparten las jornadas del Norte a un ritmo infernal con los jinetes que figuran anotados en cada una de las carreras.

Ya estaremos haciéndoles notas a los de Palermo y a los de La Plata, pero hoy le toca a los de San Isidro. Hugo Almaraz, Jorge Lezcano y Simón Cacivar, que estaban en esa jornada fría con una cantidad impresionante de anotados y a los que les esperaba una ardua tarea, por cierto.

Mientras estaban preparando cada una de las monturas, aprovecharon para saludar y felicitar al jockey Juan Cruz Villagra por sus recientes éxitos, principalmente por el de Todo Un Amiguito en el circo palermitano.

Los tres entraron a trabajar en 1980, a poco tiempo de la reapertura y desde esos tiempos, están cumpliendo 31 años en la actividad. Casi una vida…

Hugo Almaraz trabajaba en una fábrica de calzado, es de Capital Federal, tiene 57 años, casado, dos hijos y dos nietas.

Jorge Lezcano, fue talabartero, es de San Isidro, Provincia de Buenos Aires, casado, dos hijos y ya se está preparando para la llegada de una nieta, hermoso momento, por cierto.

Simón Cacivar es sanjuanino, tiene siete hijos y es el hermano de Pedro, el entrenador de caballos de carrera.

Por supuesto que vamos a solicitarles a las chicas y chicos de las chaquetillas que cuenten sus historias, al igual que a los muchachos de la balanza y al hombre del cuarto de jockeys, mano derecha y amigo de todos los jinetes, vengan de donde vengan.

Posaron para “Campana”, y al toque, Hugo, atendió con su amabilidad de siempre a “Juanpi”, Juan Pablo Lagos, que gracias a Dios le está metiendo fichas a la actividad de un tiempo a esta parte, y como esperábamos nosotros, la está rompiendo, como en sus mejores momentos. Lagos que participaba de unas cuantas carreras acusó que en cada una de ellas iba con la misma montura, que en casi todas cargaba 57 y en otra de 54, que el fieltro y que tantas cosas más. Por supuesto que los muchachos lo entendieron perfectamente, aunque con algunos comentarios que nos permitieron pasar un rato agradable. Con buen humor, con mucho trabajo van a estar otra vez el miércoles al pie del cañón.

El espectáculo de las carreras se ve en las pistas con los profesionales y los caballos, pero ellos desde el anonimato tienen mucho, pero muchísimo que ver.

Son Gente de Turf…