Campana de Largada - Turf Argentino

UNA JORNADA DE FELICIDAD POR UN TRIUNFO, LUEGO TRAS UNA GRAN FAENA, PERDER A NADA EN EL DISCO Y DE FINAL LA CAIDA, CUANDO ESTABA PARA DEFINIR

El destino nos depara a cada rato caminos no pensados. La suerte y el oficio de los profesionales en este caso puntual, permitieron que los dos jinetes volviesen caminando, por sus propios medios, al cuarto de jockeys. Igual, como se puede apreciar en la foto, es donde entra Altair, luego de bajarse de la ambulancia, que le muestra al doctor su brazo derecho, por ello se decidió que Domingos parta raudo hacia la Clínica Bazterrica, para hacerse los análisis necesarios. Mientras que Ricardo se bañaba, tomaba un descanso y partía hacia su hogar.

Arrancaron la jornada con sendos triunfos, Jorge Ricardo, colocando en punta desde la misma salida a Cálido Custodio y se vino de cabeza alta, para cruzar con cuatro cuerpos de ventaja en excelentes 1´35”84 para la milla, para alegría de los Benedicto y de Beto Neiman, como para hacerse ilusiones de las grandes con el hijo de Emperor Richard. Cálido Custodio, 508 kilos de puro músculo, ha salido a las pistas en cinco oportunidades, logrando un primero y tres segundos, lo presentó Enrique Sauro y lo llevó a la victoria Jorge “El Teacher” Ricardo, pertenece al Stud Rubio B y nació y fue criado en el Haras La Pasión.

En la siguiente carrera, también en 1400 metros, sobre pista de césped, la victoria fue para Giveback, que venía de ganar en San Isidro, pero por las molestias ocasionadas, Altair castigó metralla con su látigo y le pegó a la conducida por Pablo Falero, por supuesto sin querer, pero estuvo bien bajarlo al segundo, tras el reclamo correspondiente. La representante de La Providencia hizo todo muy fácil, dominó a pleno en la recta y pese a que buscaba los palos, llegó parando al disco, dejado muy buena impresión, con la monta de Altair Domingos.

Luego siguieron cumpliendo con sus respectivos compromisos, incluso Ricardo, perdiendo por nada el cotejo jerárquico. Hasta que llegó el undécimo turno del programa, el Premio Ferrovial, en el kilómetro. Tras una buena suelta, luchaban casi todos por el triunfo en mitad del recorrido. Por media cancha Matador Express, por dentro Young Girl, junto con Beauty Slam y El Ventolero, por el lado exterior lo hacían Glorious Tidings, Xuxa Key, Bramantino y Dako Besador.

Por los 200 finales, El Ventolero y Young Girl luchaban por la victoria, y por el centro de la pista, siempre con ellos Matador Express, que siempre estuvo en la lucha. Y cuando se aguardaba un final intenso entre El Ventolero, con el chico Diego Acuña, que festejó su triunfo por haber pasado de categoría, sin ver que Ricardo había rodado, algunos se preguntaban qué festejaba si se había caído un colega, pero para mi el aprendiz no lo vio y sólo miró hacia delante en busca del disco triunfal. Como decíamos en líneas anteriores, en un pestañear, Ricardo estaba en el suelo y entre todos los que venían atropellando, pese a que llegó a sofrenarlo, Grand Tax no podía sortear al caballo caído, Matador Express, y se lo llevaba por delante, con un Altair volando hacia el frente.

Ambos quedaron tendidos, aunque Ricardo se levantó enseguida. Altair Domingos más tarde, cuando vio que el caballo suyo se acercaba herido. Vinieron las ambulancias, y ambos jinetes comenzaron a caminar alrededor de las mismas, con Altair dolido en uno de sus brazos. Desde el palco de periodistas logramos las fotos. Que las publicamos, al igual que el vídeo de la carrera, porque no pasó nada grave. Las damos a conocer para que vean lo que hacen a cada rato los jinetes, los jockeys que se juegan la vida a cada minuto, a cada hora, todos los días, arriba de dos fierritos y con un casco, o me canso de decirlo, que aunque caigan parados, tienen lesiones.

Por suerte ambos están bien y sigo pensando que algún día, alguien, me va a dar bola, y en cada hipódromo vamos a tener el monumento al jockey. Merecidísimo…