Campana de Largada - Turf Argentino

Fue emocionante verlo dar vueltas en la redonda de exhibición junto a su peón, Juan Carlos Correa. La gente se agolpó tras la verja, aplaudiéndolo, inclusive del lado del Paddock se veía un mandil, seguramente pedido en uno de sus tantos triunfos, por alguno de sus seguidores.

Junto al Presidente de la Comisión de Carreras Emilio Dumais, acompañado por el Vocal Juan Carlos Echeverz, se encontraban dándole el último adiós de las pistas sus propietarios Juan Garat, titular de la caballeriza El Gusy, chaqueta que vistió el poderoso alazán durante tantos años y Santiago Martínez de Hoz.

Luego salió Adrián Giannetti y se subió para hacerle un paseo ante el público.

Las fotos de ese momento contienen mucha emotividad. La imagen de ese hombre con lágrimas en los ojos, despidiendo a su caballo, con el brazo derecho en alto, nos tocó a todos. Es que el peón, Juan Carlos Correa es el que lo cuidó, lo amó y lo mimó durante tantísimos años. Cuando regresaba para esperar a Life Of Victory, me salió del alma darle un abrazo.

Luego fue al recinto de los vencedores, donde justamente pasó el día de su Pellegrini, que lo recordamos líneas más abajo. Una cinta con los colores patrios y una manta le fueron colocados.

Y tomando el camino de tantas carreras disputadas en ese escenario, saliendo victorioso por primera vez, ni que el destino lo haya puesto en la vidriera, un 25 de mayo de 2005, en el premio El Florista sobre la distancia de a milla, se perdió entre los aplausos de la gente.

Ganó trece carreras incluyendo en el 2007 el Clásico Competencia (L); el Clásico Progreso (G3); el Gran Premio Copa de Oro (G1), pasando al 2008 con las victorias en el Clásico Otoño (G2); Clásico Cócles (L); Clásico Progreso (G3) y el Gran Premio Carlos Pellegrini (G1). Ya en el 2009 logró otra vez el Clásico Progreso (G3) y el Gran Premio Copa de Oro (G1), para en el 2010 lograr una sola victoria, nada menos que el Clásico General Pueyrredón (G2) sobre la distancia de 3000 metros y un sinfín de arrimes importantísimos que jalonaron su paso por las pistas.

Futuro padrillo, seguramente transmitirá ese querer correr siempre. Dando todo de sí, en cualquier pista y contra grandes rivales. La verdad que me gustaría saber, a ciencia cierta, si en nuestra historia hubo muchos caballos que disputaron cuatro Pellegrinis. Cuarto, primero, segundo y noveno.

No hubo…