Campana de Largada - Turf Argentino

A MEDIADOS DE JULIO HABIA GANADO EN SUS PAGOS, SAN FRANCISCO, UNA CUADRERA Y RESPONDIO EN SU PRIMERA SALIDA EN EL HIPODROMO DE PALERMO

Carrera durísima para dar en el blanco, salvando que la pupila del Don Florentino venía de actuar con éxito en sus pagos, los de San Francisco, Córdoba, a pasos del Haras Don Florentino, en La Francia, de la familia Grimaldi, donde naciera y fuera criada. Luciendo sus prestigiosos colores la hija de Emperor Richard, le dio pegada a la verja, saltando a su primer éxito oficial, cuando Body For Love acariciaba el disco triunfal.

La prueba se hizo con Body For Love al frente, perseguida por Sorpresa de Shangai, por el centro de la pista viajaba Dulce Donna Key que en la tranquera ya estaba al frente, cerca Kaisarissa y junto a la verja lo hacía Espamentera, con Buenas Muchachas y Gloria Visión unos pasos más atrás, la de La Biznaga, no soltando muy presta que digamos.

Ya en plena recta Dulce Donna Key trató de defenderse de Body For Love que la pasó de largo por dentro, y lo mismo hacía Espamentera, que pisó el acelerador y rápidamente pasó al frente, sacándole brillo a la verja, para cruzar con dos cuerpos y medio de luz sobre Body For Love, con Gloria Vision a a igual distancia en el tercero, cuarta Buenas Muchachas a tres más, completando el marcador Dulce Donna Key y Sorpresa de Shangai, mientras que Kaisarissa quedaba cerrando la marcha.

Espamentera (464) es hija de Emperor Richard y Jazzy Clon por Mutakddim, que también ganó como Padrillo en la reunión, pertenece al Stud Don Florentino, nació y fue criada en el Haras Don Florentino, la entrena Horacio Vela y la llevó a la victoria Daniel Díaz. Empleó 56”75 para los 1000 metros con parciales de 21”51 los 400 y 44”25 los 800. Ha salido a las pistas contabilizando las oficiales y de las otras en seis oportunidades, logrando dos triunfos, un segundo, un cuarto y dos no place. Hablamos antes de la prueba con Lucas Grimaldi, y nos decía que la zaina no se encuentra en cotejos con codo, por ello la anotación en el kilómetro de Palermo. Y todo salió bien.

¡Muy bien!