Campana de Largada - Turf Argentino

Me pone mal cuando uno se rompe el alma para contar lo que va a suceder y después no pasa. Por supuesto que si el caballo tuvo un problema, se retira y listo. Pero, aunque no sea el caso el de esta oportunidad con Che Bailarín, Immaculate y Grivko, ya ha sucedido infinidad de veces que los caballos, no digo estos, no puedo asegurarlo, ya no corrían dos o tres días antes. Por supuesto que quien escribe estas líneas, no puede andar llamando todos los días a toda hora a todos los profesionales para saber si corren o no sus caballos.

Pero por qué me pone mal esto, porque cuando le pasa algo a un profesional yo en persona llamo para ver como está. Me desvivo para mostrarle a la gente lo maravilloso del espectáculo de las carreras y cuando le solicito a un `profesional que venga a un programa, mira para otro lado. En la sección “33 de mano” de nuestra querida página, he repartido las mismas a muchos profesionales. Algunos me la traen al otro día, escritas como pueden, parece que la contestaron manejando, se ve la buena voluntad, otros se agarran la cabeza cada vez que les pregunto y algunos ya la perdieron hasta tres veces. Y varios que ni siquiera tienen la bondad de decirme…¡no la hice!. Profesionales de primer nivel y hasta algunos que recién comienzan.

Para el programa de Gambling TV, Los Protagonistas del Turf, donde acompaño a mi amigo Pablo Carrizo, todos los miércoles por la noche, tenemos una hora para nosotros solitos, un poco más y tenemos que ir a buscar a los profesionales con helicóptero. Todavía de rodilla no nos pusimos.

Ni hablar de algunos directivos, de distintos establecimientos, que prefieren dar notas y publicidad a otros medios. Ellos saben quienes son.

Yo, y aquí y ahora no me preocupa ponerme adelante, porque desde hace 40 años que vengo luchando por el turf y para el turf y sólo he pedido a los profesionales en toda esta vida a puro turf, que se preocupen por difundir la hípica. Nosotros hacemos todo lo que podemos. Hay días, como el del Jockey Club, que me he quedado escribiendo y subiendo las 340 fotos, hasta las nueve de la mañana, después de trabajar de la primera hasta la última y después hacer el programa Campana de Largada por Gambling TV.

Marcelo Durán labura 28 horas por día con ESPN, la UTTA y los remates de Fallow, más todo lo que puede hacer en los establecimientos de cría que lo contratan. Y los muchachos de Tribuna Paddock, en Radio Cadena Uno (AM 1240) que salen todos los lunes y los viernes de 9 a 12, Héctor Torres, Pablo Carrizo, Nicolás Alcalde y César Gonseski, se matan por informar, seis horas semanales y vaya si tienen que pelearla.

Nosotros no tenemos tanta plata para poner una persona en cada uno de los studs. Pero sí el profesional puede llamar a un par de periodistas y decirles que tal o cual caballo no va a correr. O avisar con tiempo al hipódromo. Si pasa a la mañana del día de la carrera no se puede hacer nada, pero…

Y en ese caso, también me pongo por delante, porque pese a algunos, mis pares, son mis pares. Y tengo ejemplos para contar. Por caso, uno lejos en el tiempo, pero vale. Recuerdo cuando la Asociación de Periodistas me mandó a Brasil para cubrir el meeting del fin de semana, donde corría París y Golilla, entre otros caballos argentinos, bajé del avión y repartí a cada medio, uno por uno, un juego de fotos. En el presente si alguien necesita una foto, por h o por b, se la mando inmediatamente. Incluso, pese a todo lo que me sucedió, cuando descubro un error, lo advierto a viva voz en el palco de periodistas, para que mis amigos, mis colegas, no hagan algo mal. Y tengo testigos. Nunca me preocupó la primicia. Comparto todo. Informo lo que sé. No guardo nada.

Ya me ha pasado que cuando entregamos premios a figuras van aunque sea a las cuatro de la mañana y cuando se les pide que vayan a dar el presente, como una institución del Turf, hay que pedirles por favor. Y tampoco van. Por suerte podemos decir que estamos en los Olimpia y que estamos en las ternas de los Newbery. Y a que no saben quién se rompió el alma para que ello suceda. Adivinen.

Señores llegó la hora de ponerse al servicio de la hípica. Cuatro tipos no pueden estar en todos lados, colaboren. Acompañen, ayuden, respeten el trabajo de los demás.

Mirando para otro lado, no preocupándose, directivos, profesionales, cabañeros, propietarios, estamos como estamos. Con los dos diarios más importante del país con una pagina diaria.

Hemos perdido presencia. No perdamos lo poco que nos queda. Seamos solidarios.

Y tratemos todos juntos de difundir nuestra hípica.

Ahora, ya.