Sin grupos
GATA PORTEÑA SE IMPUSO POR DIEZ CUERPOS, FACIL
por Osvaldo Martinez
Se mostró muy nerviosa, con mucho genio en la redonda de exhibición. La verdad se pensó en un momento que no iba a responder a su favoritismo. Pero la pupila del Rubio B., pisó la recta en ganancia y a partir de los 450 se dedicó a sacar cuerpos y más cuerpos.
La hija de Grand Slam, al cuidado de Juan Javier Etchechoury y conducida por el gran Jorge Ricardo, consiguió su segundo impacto por diez cuerpos bien contados, en cuatro salidas, con un segundo y un tercero. Empleó 1´21”95 para los 1400 metros, con los siguientes parciales, 22”19 los 400; 44”93 los 800 y las doce cuadras en 1´8”71.
Pegasus Winner, una importada que venía de ganar, la siguió todo el tiro, sin poder alcanzarla.
Cuando estábamos listos para recibirla en el recinto de los vencedores, nos cruzamos con el peón de la yegua y le solicitamos nos diera su nombre. Ramón Pérez dijo, mientras se preparaba a tomar a la alazana.
Nombre de boxeador, le comenté y enseguida me saqué un diez, porque Ramón me dijo acertó, somos familia de boxeadores. Tomó a Gata Porteña y se fue peleando hacia la veterinaria.
En ese momento recordamos lo que comentó Ricardo Benedicto el día de los Pellegrini, del valor que se le da en la caballeriza Rubio B., a todos los empleados, pasando por cada uno de los oficios y empleos.
Jota Jota “CQC” Etchechoury; Jorge “El Teacher” Ricardo y Ramón Pérez.
Hay equipo…
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