Sin grupos
CAPOEIRO, LA ALHAJA DE LA FAMILIA, PUSO TOPE Y NO SE VENDIO
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por Osvaldo Martinez
TRAS UNA INTENSA PUJA ENTRE VARIOS OFERENTES SE ABRIO EL SOBRE Y LA BASE DE $ 700.000 NO CONFORMO AL COMPRADOR FINAL Y ENTONCES, LA JOYA, A CASA
La verdad sea dicha hacía mucho, pero mucho tiempo, que el Tattersall de Palermo no presentaba un lleno total. La nueva empresa Argentina Premier, Primera Edición 2013, Productos 2011, remataba seleccionados ejemplares de los destacados Haras La Leyenda, Santa Inés, De La Pomme, Viejo Tombo, La Esperanza, Avourneen , Carampangue, El Wing y Tributo a Opera. Por supuesto con la organización de la firma Agencia Fallow. Todo el equipo de primera y en la cancha, Arturo Moscón, el martillo alado y Marcelo Durán, el hombre de ESPN.
Las expectativas máximas, el número uno del catálogo, un tal Capoeiro, macho, nacido el 6 de agosto de 2011, nacido y criado en el Haras La Leyenda. Es un hijo de Exchange Rate y Cayaya, por Slew Gin Fizz. Se recuerdan de la tordilla que la peleaba y también le ganaba a la gran yegua, Ollagua, de La Providencia. Incluso en un Criadores empataron el primer puesto.
Todos los productos serían vendidos en diez cuotas iguales, pero a Capoeiro le agregaron la misma forma que se hizo con los productos del Haras San Benito el martes pasado en estas mismas instalaciones. O sea que habría una puja importante para llevarse la joya de La Leyenda, pero después se tendría que abrir el sobre. Fue así que se fueron sucediendo las ofertas, hasta que el “martillo alado”, golpeó la baranda de madera de tantos años en el edificio de Avenida Libertador, para cederle el hermoso potrillo a Juan Carlos Bianchi, la “ola peruana”, dijo Arturo Moscón. La última oferta y que decretó la casi pertenencia del ejemplar, del que Alberto Stein, mirándolo en el ring de ventas, dijo estar emocionado, fue de $ 550.000.-
Se abrió el sobre y Arturo Moscón dijo: el precio base de Capoeiro es de $ 700.000.- Le preguntó al comprador si estaba en condiciones de abonarlo en esa suma. Ante la negativa, se procedió a la lectura de la segunda cláusula, que era de abonar la mitad, o sea $ 350.000.- y por ende, quedarse con el 50% del ejemplar en cuestión. No, fue la respuesta, por consiguiente, se procedió a retirar al Exchange Rate del remate. Una pena, porque no hubo una tercera posición, una tercera propuesta, que hubiese dejado, me imagino, contentas, a las dos partes.
Tras un par de caballos rematados en $ 21.000.- el número 19, para Jorge Valdivieso, y de $ 25.000.- el número 27, para Juan Carlos Maldotti, recuerden que eran diez cuotas, por consiguiente esos dos productos fueron vendidos en $ 210.000.- y $ 250.000.-, respectivamente.
De pronto saltó a la cancha el número cinco, llamada Samba Kiss, también del Haras La Leyenda, hembra, nacida el 4 de julio, hija de Exchange Rate y Summer Scent por Kingmambo, precioso ejemplar, por el que se pagaron por cada cuota nada menos que 50.000 pesos, redondeando un total de $ 500.000.- A que no saben quién se la llevó. Sí acertó, sigue en el programa, Juan Carlos Bianchi en comisión, más caliente que una pipa encendida.
Luego se fueron sucediendo precios más que interesantes, los productos estaban impecables, todos, se los puedo asegurar. Les siguieron al precio máximo: el 6 se lo llevó Víctor Almirón en $ 36.000.- y el 8 fue para Agustín Pavlosvky con $ 28.000.-
Dos hembras por Exchange Rate, hermosísimas, nacidas y criadas en La Leyenda.
Un éxito rotundo, que propietarios, entrenadores y directivos, más los periodistas de siempre, presenciaron en el escenario palermitano, el mismo que uno de pibe visitaba escondido en lo más alto de las gradas, no había sillas ni mesas ni comida en esa época, donde Bullrich, nos tocaba con su varita mágica, pese a que muchos como yo, no nos animábamos a saludar a nadie, por si nos anotaban con una propuesta.
Tiempos idos, que supimos vivir intensamente. Inolvidables.
Muy buen remate de Argentina Premier. Nos encantó el catálogo y toda la publicidad que hicieron en distintos medios. No en el nuestro, pero tenemos la suerte que varios de los Haras participantes nos acompañan y nos ayudan día a día, mes a mes, año tras año. Párrafo final para las luces del Tattersall. Hay que buscar que las paredes estén libres de colores extraños. Cuesta y mucho, dar en la tecla con la luz y los colores en las máquinas de fotos. Algo parecido nos sucede en el Tattersall del Hipódromo de San Isidro. No es una boite el ring de ventas. Es un ring de ventas.
Eso…
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